Hiperplasia prostática benigna (HPB)

Conozca la embolización de la arteria prostática, una forma eficaz y no quirúrgica de deshacerse de los miomas.

Más información sobre la HBP

¿Cuáles son los síntomas asociados a la hiperplasia prostática benigna (HPB)?

Uno de los primeros y más notables síntomas que experimentará un paciente con HBP son los problemas urinarios. La necesidad frecuente o urgente de orinar durante el día y el aumento de la frecuencia de la micción nocturna son síntomas comunes. La dificultad para empezar a orinar, un chorro débil, la vacilación al iniciar la micción y la incapacidad para vaciar completamente la vejiga también pueden afectar a los enfermos de HBP. Estos síntomas pueden afectar notablemente a la calidad de vida del hombre. 

 

Si se ignoran los síntomas y esta afección progresa, pueden producirse complicaciones más importantes. Los cálculos en la vejiga pueden ser el resultado de la incapacidad de vaciar la vejiga, y contribuyen a que haya sangre en la orina e infecciones de la vejiga. También pueden producirse infecciones del tracto urinario por no vaciar completamente la vejiga. Si la próstata crece lo suficiente, puede incluso provocar la imposibilidad de orinar, lo que se conoce como retención urinaria.

¿Cómo se trata la hiperplasia prostática benigna (HPB)?

Los tratamientos tradicionales incluyen medicamentos y cirugías de próstata. Muchos pacientes pueden estar tomando o haber probado varios medicamentos. Pero a pesar de la medicación, los síntomas pueden progresar con el tiempo. Los urólogos pueden ofrecer múltiples opciones de tratamiento quirúrgico (RTUP, prostatectomía simple, etc.) y de procedimiento (Urolift, Rezum, láser Greenlight, HoLEP, etc.). Pero muchos hombres no quieren someterse a esas opciones por diversas razones, como la recuperación prolongada, la hospitalización, el riesgo de efectos sexuales secundarios y el deseo de evitar que se realice un procedimiento a través del pene. 

 

La embolización de la arteria prostática, o PAE, es un procedimiento mínimamente invasivo diseñado para ayudar a aliviar los síntomas causados por la hiperplasia prostática benigna. Para ello, se bloquean los vasos sanguíneos que alimentan la próstata y que hacen que ésta se agrande de forma anormal. Una vez bloqueados estos vasos sanguíneos, la próstata puede volver a un tamaño más saludable, y el paciente experimentará un alivio significativo de los síntomas.

¿Listo para dar los siguientes pasos? Realice nuestro cuestionario para saber si puede optar a las opciones de tratamiento mínimamente invasivo.